1. 1. ¿Cuál es el rol que han jugado los docentes de los espacios educativos mediados por TIC en los que usted ha tomado parte en el pasado? ¿Cómo lo describiría usted? ¿Son moderadores? ¿Facilitadores? ¿Expositores? (Y de hecho, cómo comprende usted cada uno de esos términos?)
Hablando de los docentes que he tenido en espacios educativos mediados por TIC, puedo decir que el rol que ellos han cumplido es un rol ecléctico. Es decir, he visto que su estrategia, su metodología, su manera de enseñar está ligada a la acción acompañar. Según la situación, el tema, el asunto, el nivel de comprensión o de complejidad he visto cómo los docentes han dedicado espacio para exponer, para facilitar y para moderar.
Ahora bien, si miramos cada palabra por separado puedo decir lo siguiente. Por expositores entiendo ese grupo de docentes que dominan una temática y la muestran a sus estudiantes a través de la oratoria, lectura de imágenes, textos, videos y lectura de diapositivas. Aclarando, desde lo leído, posibles dudas.
El caso de los docentes facilitadores se circunscribe a lo que comúnmente se entiende por facilitador, facilitar. Un docente en este sentido proporciona datos, información, recursos, espacios, posibilidades para llevar a cabo una tarea, facilita direcciones electrónicas donde sea posible hallar información para complementar o para aclarar dudas.
Por último, tenemos a los docentes moderadores. Esta clase de docentes, además de ofrecer información, acompañan el proceso de comprensión de la misma. Moderan tiempos de trabajo, pautas, instrucciones y asesoran l estudiante para que se motiven a participar adecuadamente. Aprovechando al máximo las oportunidades de aprendizaje.
2. Regrese a su reflexión de la segunda semana acerca de su participación en los espacios educativos mediados por TIC. ¿Existen acciones concretas que sus docentes hayan desarrollado, que hayan estimulado o inhibido su participación en estos espacios? ¿Puede identificar acciones que hayan estimulado o inhibido su autonomía?
Puedo decir que mi participación en estos espacios ha encontrado siempre acciones que me motivan a continuar con los procesos formativos. No me he sentido ni violentado ni agredido. Por el contrario, las dinámicas, estrategias, usos, procesos y propuestas de los docentes me han servido para reconocer otras disciplinas de estudio, fortalecer mi práctica pedagógica y para orientarme en nuevas rutas de aprendizaje. Específicamente, comento el hecho de haber generado una disciplina de estudio con autonomía: el aprendizaje con las TIC me hizo ver una nueva versión de lo que es un autodidacta.
3. ¿Puede identificar comportamientos o prácticas específicas que usted haya aprendido de sus profesores en cuanto al manejo de la tecnología?
La formación con autonomía es uno de los comportamientos, generar espacios y tiempos propios de aprendizaje. Ahora en cuanto a prácticas, señalo las siguientes: la creación de ambientes virtuales de aprendizaje; la asesoría y acompañamiento a los estudiantes en todo momento, es decir, aula abierta.
4. Regrese a su reflexión de la semana anterior acerca de la evaluación. ¿De qué manera incidió la evaluación (si lo hizo) en la labor de moderación de sus docentes? ¿Usted diría que la modeló, la limitó, o no tuvo incidencia alguna?
Generalmente la evaluación en estos espacios no ha sido una evaluación que se fije en el resultado. Se han tomado los procesos y con ellos la evolución de los estudiantes ha estado orientada por alcances, logros y metas, no por números o letras y mucho menos por indicadores finales.
Una evaluación en este sentido ha permitido modelar el proceso, reorientarlo y guiarlo hacia el logro de aprendizaje.
Luego de dar una mirada a las ideas de Collison et al. Sobre moderación (consulte los recursos sugeridos), intente aclarar en su blog de qué se trata eso de la "facilitación desde el lado", y trate de evidenciar qué implicaciones tiene en cuanto a la concepción del conocimiento. ¿Qué ocurre cuando un docente se "quita del centro"? ¿Qué mensaje conlleva esto?
Entiendo por “facilitación desde el lado”, según lo planteado por Collison, aquel proceso en donde prima el verbo acompañar. Es decir, el rol del docente es el de un sujeto que muestra el camino, promueve el análisis de alternativas a seguir, guía en el proceso, no haciendo por ni para el estudiante, sino con el estudiante.
Lo anterior es posible si “se quita del centro al docente”. El docente es un actor del proceso, no el más importante ni el único. Como actor, estructura procesos, promueve estrategias y atiende fundamentalmente a aquello que despierte interés en el “otro” no simplemente en él ni en el programa.
Cuando un docente “se quita del centro” es posible entender que el proceso no se agota en quien enseña, pues cada vez es más evidente que ese que enseña es, a su vez, un estudiante. Esto es, docente que enseña pero que está abierto a nuevas estrategias de aprendizaje.
Un docente que no está en el centro entiende que él no tiene la última palabra en el proceso. Es un interlocutor más en el proceso de enseñanza aprendizaje.